lunes

QUERIAN NOTICIAS????... AHORA YA LAS TIENEN!!!!

MIRTA BUSNELLI GANADORA DEL MF POR MEJOR ACTRIZ DE REPARTO EN COMEDIA!!! MUY BIEN GANADO!! TE LO RE MERECES MIRTA!!

sábado

“Los Diegos” y Mirta Busnelli celebraron los diplomas para “Los Pells

Entre las figuras que anoche recibieron su diploma al Martín Fierro estuvieron tres representantes de uno de los programas más nominados: “Los exitosos Pells”.
Mirta Busnelli compite con Andrea Bonelli del mismo ciclo, entre otras actrices, como Pata Echegoyen, por su mejor actuación en protagónico de comedia.
Diego Reinhold es “virgen” en Martín Fierro y estará el miércoles que viene compartiendo mesa con su amigo y colega, también nominado por su labor en “Los exitosos..”, Diego Ramos

domingo

"No podríamos tener una amistad demandante"

Son amigas desde que trabajaron juntas en Como pan caliente, hace 12 años. Comparten el mismo tipo de humor.

¿Desde cuándo se conocen?

Marita: Desde hace 12 años. Nos hicimos amigas en Como pan caliente.

¿Cómo pudieron sostener la amistad después de la tira?

Mirta: Uno se ve todo el tiempo con un montón de gente, y con algunas podés continuar la amistad.

Marita: La amistad no es algo que se elige, simplemente sucede.

¿Es como el amor?

Marita: Exactamente. Hay un montón de gente con la que se tiene afinidad, pero la amistad no sucede. Y con otras personas, por algo misterioso, sucede.

¿En qué tienen afinidad ustedes?

Mirta: Somos muy diferentes en la forma de ser, pero en algún punto del espíritu nos entendemos.

Marita: Ese es el misterio. Para ser amigo o para enamorarse de alguien, no es necesario que seas muy parecido. A veces los opuestos se atraen. Le voy a agradecer eternamente a Mirta lo que me hizo reír cuando trabajé con ella. Antes yo tenía una risa muy tensa, y ella me la aflojó, (risas). Es una persona que te llena de humor.

Mirta: Ese es el vínculo, ella monologa y yo escucho.

Marita: ¡No!

Mirta: Lo hago con gusto.

Y para vos Mirta, ¿qué tienen en común?

Mirta: Marita es una persona que me da alegría. Reflexiona sobre su vida, sus elecciones, sus amistades, tiene una cabeza muy especial. Por momentos parece que está totalmente loca y, por momentos, que tiene una sabiduría que a mí me encanta.

Una habló del humor y la otra de la alegría.

Marita: Las personas con humor, como Mirta, tienen una mirada inteligente de la vida.

Mirta: Estoy jodiendo todo el tiempo. Pero hay algo con lo que no jodo. Esa afinidad por la cual vos disfrutás del otro, que te da gusto estar. Yo tengo mis oscuridades y mis sombras, pero cuando nos juntamos, no sé por qué, no aparece eso. Podemos hablar de nuestras tristezas, miserias, conflictos. Aunque hablemos de lo peor de la vida, estamos juntas.

Marita: Aunque aparezcan los defectos. En otra persona te molestaría y en tu amigo, la aceptás. Cuando uno se casa, el marido no tiene defectos. Los tiene, pero están aceptados. Y en otra persona te da bronca o no, le aceptás lo mismo. No se puede explicar.

Mirta: Está bien lo que dijiste Marita, vas muy bien (risas).

¿El secreto de la amistad y el amor es la aceptación del otro?

Marita: Sí, uno confía cuando se siente aceptado por el otro.

Mirta: Estoy viendo en Marita una persona que deja tanto que desear, pero yo la acepto (risas). Yo me siento chocha que, siendo el desastre que soy, ella me acepte (risas). Hay gente con la que te juntás y la vida empieza a tener colores.

¿Cuántas amigas tienen? ¿Son como Roberto Carlos?

Marita: Yo tengo cinco amigas de la infancia a las que veo bastante. Hemos sabido de nuestras vidas durante estos 40 años o más. Después están los amigos que uno se hace de grande, he heredado amigos de mi marido.

Mirta: Sí, yo también tengo distintos grupos.

Marita: Son vínculos fuertes pero muy diferentes.

¿Hay varones?

Marita: No, son mujeres.

Mirta: Yo tengo amigos hombres. Heterosexuales y homosexuales. El padre de mi nena es un amigo a esta altura. Es familia. En realidad mis ex, en general, son ahora amigos. Son gente que he querido mucho y que me quieren.

Marita: A mí me parece divino lo que le pasa a Mirta con Axel (Pauls). Tienen un hija, se quisieron, y ahora son familia y se siguen queriendo de otra forma. Ojalá eso le pasara a mucha gente.

Mirta: No hice ningún esfuerzo. Es una persona especial que yo quiero y valoro mucho. Es como si fuera de mi sangre, es el papá de mi hija, yo lo amé.

¿Te has peleado con amigos, Mirta?

Mirta: Sí. Perdí una amiga. Esa gente que vos vas a visitar y te dice "che, pero no me llamaste". En lugar de disfrutar de que llegaste.

Marita: No podría tener una amistad demandante.

Mirta: Yo tampoco. Si tengo ganas de llamar a alguien, lo llamo.

Marita: No hay nada que sea más ridículo que demandar. En todo caso, uno puede decir que le gustaría tal cosa, pero demandar no sirve para nada. Es algo que le estás pidiendo al otro que, por algún motivo, no puede hacer, entonces ¿para qué pedirlo? Decir no es demandar. Son cosas diferentes.

Mirta: Es verdad. Eso no quiere decir que uno pueda tener momentos donde se raye un poco.

Marita: Dicho así parece que estuviéramos escribiendo un libro (risas).

Mirta: Los amigos son una compañía para pensar en la vida y en el mundo. Con ellos se puede pensar en voz alta.

¿Hablan pavadas también?

Marita: No hay diferencia entre lo superficial y lo profundo porque la persona se lleva a todos lados.

¿Dónde aprendiste todo esto?

Marita: Me hacés sentir la mujer del Pastor Giménez. (Risas).

Mirta: Siempre tuvo una mirada muy evolucionada. A mí siempre me llamó la atención, transmite la posta. Poca rosca.

Marita: Es el viaje que tengo en mi cabeza. Sobre una búsqueda interior, meterme en mis dolores, en mis miserias, estar ahí, quedarte, ver los cambios.

Mirta: ¿Hay algo más que el paisaje interior? La realidad no existe.

Marita: Hay gente que se siente re feliz teniendo un negocio de ropa y que el negocio venda (risas). Yo lo respeto muchísimo. Simplemente creo que mi destino es bucear sobre mí. Me acuerdo que muchas veces volvía a mi casa y me decía "vos sos un bleuf de vos misma, porque decís algo que todavía no podés hacer".

¿Y era verdad?

Marita: Por supuesto. Lo que te hace estar más contenta es ser lo que decís.

¿Te cae bien el marido de Marita? Eso es clave.

Mirta: ¡Sí!

Marita: De mi marido te enamorás porque es lo más divino que hay.

Mirta: Desde que están juntos la veo 99 por ciento menos que antes, (risas). Me la robó.

Marita: Estoy haciendo una tira diaria. Hago teatro. ¿En qué momento querés que te vea?

Mirta: No es un reclamo, es un mimo, quiero decir que tengo ganas de verte.

Si estás con una emergencia afectiva y decís "voy a la casa de una amiga a verla" y está el marido, es complicado.

Mirta: Es una cagada. El es macanudo, pero nosotras tenemos nuestra relación.

No sé ustedes, pero yo prefiero ver a dos amigas, no más.

Mirta: Yo también, no me gustan los grupos. Casi todo me gusta íntimo. No me gustan las fiestas multitudinarias.

¿Por qué se las ve tan jóvenes?

Marita: Yo voy a un químico, que hace cosas de cosmetología. Y me parece que una cara relajada, es una cara más joven. Me encanta la cara de la gente grande relajada.

¿Y cómo se serenan sin botox?

Marita: Con botox no se serenan nada, se endurecen. Es una máscara. A mí me encanta la expresión. La expresión es serenidad.

Mirta: Cuando estoy bien, en calma, tengo ganas de vivir y ahí, en general, me dicen que estoy más joven. A veces no sé qué edad tengo. No sé si estoy al principio de mi vida, al final, al costado (risas).

¿Hay algo más que el presente?

Marita: Nada, la eternidad.

Mirta: El tiempo es una construcción.

Estamos las tres locas (risas).

Mirta: Uno viene con una especie de carga cultural, genética que es "vas a ser feliz y vas a lograr estar bien cuando progreses". La idea de progreso es una idea que me provoca una gran depresión. La carrera. Cuando consigas dinero, cuando tengas poder. Cuando tenés un buen momento con alguien, no tiene que ver con la carrera, es la vida. Te entendiste con una persona en algo y sentiste algo hermoso. Y en ese momento estas ahí y no querés estar en otro lugar más.

Agradecimiento: Restaurante Novecento, Las Cañitas.